La psicología uniendo generaciones femeninas
Carolina Grbac Núñez, psicóloga titulada el año 2013 de la Universidad Central, se colegió el año 2015 y asistió a la primera ceremonia de bienvenida a los nuevos socios en marzo de 2016. Hasta aquí nada particular, lo llamativo es que lo hizo en compañía de su abuela, Susana Navarrete Martínez, quien es una de las primeras mujeres que alcanzó el puesto de profesora en la carrera de psicología en la Universidad de Chile, ella comenzó a estudiar la carrera en 1955 de la misma universidad, pero se demoró un par de años en terminar ya que una vez con todos sus ramos aprobados partió becada a EE.UU. University of Minnesota (Master of Arts).

E.C.C. ¿De qué manera influyó en tu decisión de ser psicóloga el hecho de que tu abuela lo sea?
CG: Mi abuela siempre ha sido una inspiración -no solo como profesional- sino también como madre, mujer, hija, hermana; docente, etc. -Las mujeres tenemos esa hermosa capacidad de ser multifacéticas y lograr cada desafío-. Por supuesto Susana es mi inspiración, hoy sigo humilde y lejanamente sus pasos, muy feliz y plena como docente y formadora de las nuevas generaciones. Ella fue la profesora más antigua de la U. de Chile y claro es un sueño personal lograr tal nivel de desarrollo y logro.
E.C.C. ¿Cómo mujeres y psicólogas, comparten visiones semejantes de la situación de la mujer en la sociedad actual?
C.G. Hoy en día logramos compartir una visión del mundo, de la educación, de la política, de la ética, de la gestión del conocimiento, ¡conversamos de todo!, aprendo cada día de ella y –creo a veces- ella de mí. Comentamos casos de estudiantes, noticias, películas, obras de teatro, etc… Su visión siempre es clara, serena, con la voz de la experiencia y ambas compartimos la necesidad perentoria de la presencia femenina en la vida laboral, profesional y de la trasformación del rol de la mujer en la vida laboral, como líderes, agentes de cambio, como ejes fundamentales del sistema de trabajo. Creo ambas nos declaramos feministas, entendiendo que existen diferencias de fenotipo obvias, estoy segura nuestra visión del mundo es una profunda deuda social mundial con nuestro género.
E.C.C. ¿Cuál fue tu impresión al incorporarte al mundo laboral?, ¿ y tu abuela te ha comentado de cómo fue su incorporación al mundo laboral?
C.G. Tuve la oportunidad de comenzar mi vida laboral bajo el alero de una mentora inigualable, hoy profunda amiga y consejera: Juana Anguita. Fue mi primera jefatura la que hizo que me re-enamorara de mi profesión y el oficio que significa ser psicóloga (mi titulo dice psicólogo); con mujeres como ellas creo que no hay duda alguna de lo marcador y revolucionaria de la mirada femenina en el mundo laboral.
Hoy en mi equipo actual (docente Universidad Santo Tomás, sede Santiago) también cuento con una mujer como líder (Sandra García), mujeres fuertes, inteligentes, madres, hermanas, hijas y esa infinidad de profesiones que cumplimos las mujeres… la verdad son una inspiración.
Claramente hoy es diferente a cuando mi abuela se incorporó al mundo laboral. Ella tuvo que responder constantemente preguntas que hoy nos parecen claras, como: ¿qué es un psicólogo? ¿Qué hace un psicólogo? Hoy muchas personas conocen y valoran nuestro rol, y se ha transformado profundamente la visión de la sociedad frente a nuestro quehacer.
Sin duda alguna nuestra historia como país con la psicología tiene una deuda. Partimos siendo un país revolucionario, con la primera escuela de psicología de Latinoamérica y hoy nos hemos quedado atrás. Creo en este sentido el Colegio de Psicólogos está jugando un papel fundamental, en el posicionamiento de nuestra profesión.
Agradezco profundamente la oportunidad en el Día Internacional de la Mujer, de poder expresar mi sensación de inconformidad del lugar las mujeres en la vida laboral actual. Creo que tenemos un largo camino, que lo han empezado a asfaltar grandes mujeres y que está en nuestras manos continuar poniendo un grano de arena diariamente en el camino de la igualdad de género.
Agradecimientos a
Carolina Grbac Núñez
Susana Navarrete Martínez